como cual niña juego
Juego a tomar decisiones en medio de la noche,
a dejar muda mi razón y afrontar de lo que mi corazón confuso niega.
Creo que por primera vez, la parte racional de mi vida, se ha aliado con mis emociones,
pero incluso así, no consigo colmar mi pena, ¿o es alegría lo que siento?
Estás y no te tengo
Fehacientemente la soledad, apena aún mis pensamientos
y en cuanto más pretendo aclarar mis dudas,
más atormento mis inquietudes.
Y de cual inmadurez quiero cobrar sentido,
a cual situación se escapa de mi entendimiento
Como cual niña huir, negarte, enfuscarme...
por ser lo que quiero, por ser quién necesito.
Pero ya no soy una niña, aunque juegue hacerlo
de experiencia me valgo y del dolor aprendo
que lo que por igual creía querer,
el tiempo lo obvia.
Pero aún juego contigo,
como si tú fueses el único juguete que halla creado ilusión.
Realmente el amor es cosa de niños, pues cuando la magia, el afán de quererlo desvanece, sobrellevarlo es aún más arduo,
y yo quiero aprender a jugar contigo,
pero temo que mi amor te rompa en pedazos,
quizás lo mejor sea dejarte a un lado,
donde ubico mis otras distracciones,
pero la razón me falla,
quiero jugar contigo.
Dicen que la ilusión versa sobre su debilidad,
que es tan débil como efímera
y de una parte de la historia
yo comencé a flaquear, a temer, a dudar...
y mi orgullo no me deja hacerlo.
Quisiera en sí, de mi niñez valerme, de mi inocencia desbordada,
y si tu amor me hiere, huir de él.
Pero no logro hacerlo
y como cual niña a su juguete, anclada a sus anhelos
aquí permanezco, atada a ti, esclava de mis inquietudes,
fiel a mis pensamientos,
por un cúmulo de sensaciones
que en un vaivén me embriagaron
de cual confusión, de indecisión, de cobardía.
Y todo ello acongoja mi corazón,
sin dejarme ver salida a cual laberinto llamado amor.
Sí, “amor” te sentí, pude verlo, a ras de mi razón.
Pero ya no más,
afliges cada parte de mi entereza,
con tus inseguridades
y realmente necesito que todo vuelva a su cauce,
pero cuando tú estás, de pronto, yo ya me he ido...
cansada de esperar.
a dejar muda mi razón y afrontar de lo que mi corazón confuso niega.
Creo que por primera vez, la parte racional de mi vida, se ha aliado con mis emociones,
pero incluso así, no consigo colmar mi pena, ¿o es alegría lo que siento?
Estás y no te tengo
Fehacientemente la soledad, apena aún mis pensamientos
y en cuanto más pretendo aclarar mis dudas,
más atormento mis inquietudes.
Y de cual inmadurez quiero cobrar sentido,
a cual situación se escapa de mi entendimiento
Como cual niña huir, negarte, enfuscarme...
por ser lo que quiero, por ser quién necesito.
Pero ya no soy una niña, aunque juegue hacerlo
de experiencia me valgo y del dolor aprendo
que lo que por igual creía querer,
el tiempo lo obvia.
Pero aún juego contigo,
como si tú fueses el único juguete que halla creado ilusión.
Realmente el amor es cosa de niños, pues cuando la magia, el afán de quererlo desvanece, sobrellevarlo es aún más arduo,
y yo quiero aprender a jugar contigo,
pero temo que mi amor te rompa en pedazos,
quizás lo mejor sea dejarte a un lado,
donde ubico mis otras distracciones,
pero la razón me falla,
quiero jugar contigo.
Dicen que la ilusión versa sobre su debilidad,
que es tan débil como efímera
y de una parte de la historia
yo comencé a flaquear, a temer, a dudar...
y mi orgullo no me deja hacerlo.
Quisiera en sí, de mi niñez valerme, de mi inocencia desbordada,
y si tu amor me hiere, huir de él.
Pero no logro hacerlo
y como cual niña a su juguete, anclada a sus anhelos
aquí permanezco, atada a ti, esclava de mis inquietudes,
fiel a mis pensamientos,
por un cúmulo de sensaciones
que en un vaivén me embriagaron
de cual confusión, de indecisión, de cobardía.
Y todo ello acongoja mi corazón,
sin dejarme ver salida a cual laberinto llamado amor.
Sí, “amor” te sentí, pude verlo, a ras de mi razón.
Pero ya no más,
afliges cada parte de mi entereza,
con tus inseguridades
y realmente necesito que todo vuelva a su cauce,
pero cuando tú estás, de pronto, yo ya me he ido...
cansada de esperar.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Bueno dejar vuestra firma...
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio