si por hablar

Dicen que no es más sabio el que todo lo cuenta, si no áquel que de lo poco que cuenta lo sabe todo...

a veces el silencio cuenta verdades

Algunos días hablo del amor, de su inocencia, de su fragilidad, de cómo un corazón en su palpitar se hace ingenuo y otro le acaba regalando fuerzas
... hablo y creo en un amor, a ciegas, sin medidas, subrealista...

Siempre despierto

Soy consciente de que muchas veces hablo por hablar, pero en mis tantas y tantas palabras siempre cuento mi verdad, aunque cuente lo vivido, ignoro lo que me queda aún por vivir, y de ahí mi franqueza, mis errores versan siempre en que creo que ya lo sé todo, cómo sorprende la vida, hoy vuelvo a sentirme niña, inocente, confusa... muchas veces pierdo la partida a la razón, pero en cuestiones del corazón, éste acaba fortaleciéndose, dicen que uno no está vivo si no siente, y el dolor es también un sentimiento, la indecisión, la confusión... todo ello alberga el saber y cuando se habla de amor, uno siente, hay que dejarse llevar, ser como cual esponjas, empaparse de todo lo que este sentir pueda brindarnos, pero inevitablemente, tras las risas, el cosquilleo en el estómago, la ilusión... siempre nos aterra una lágrima _ tras su inocente velo lo envuelve mil máscaras ¿A caso no recuerdas esa sensación?; ¿no lo has vivido?; ¿ me hablarías de amor?_

El amor aclama al dolor, como dos extremos, en tanto uno deja de existir el otro no adquiere grandeza.

Hablo del amor, de lo que me haces sentir, como cual niña, ilusa, ingenua, deseosa... ASUSTADA!

Ya no hay manos que me sostengan y siento como este sentir me hace caer... pero incluso así arriesgo mi suerte.



Hablo de la soledad, porque incluso entre tanta gente siempre encuentro mi escondite y no es que me aferre a estar sola, pero al final del día, mis miedos acaban por doblegarme.
Estoy sola y veces pienso que, inconscientemente busco estarlo... pero entre tanta oscuridad no te hallo y temo no ver más que lo que de entre estas paredes alcanza mi mundo _ Gracias por ser esa parte en mi que no pierde la cordura_ por ser mis ojos.


Incansablemente hablo de los miedos, de los sueños, de la magia de creer que nada ni nadie pueda detenerte_ y aunque muchas veces ello ocurra_ y quizás frenen tus pasos, que decaigan tu ansias, pero al fin y al cabo el camino es muy largo. El tiempo nunca se detiene y con él, tus fuerzas se irán recomponiendo... de ahí la dificultad, lograr que avance.

Puedes permitir que algo o alguien te "afecte", que un adiós duela, que un engaño desilucione, que tus fracasos calmen tu sed, pero incluso cuando todo esto te "afecte" no puedes dejar que te "influya", recuerda eso, de todo aprendemos, de lo malo incluso nos fortalecemos aún más, pero ello puede enseñarte a vivir, no puedes dejar que influya, al final del camino, muchas cosas serán distintas. No todos los que quieres llegan contigo, no serás como empezaste, pero si hay algo que perdura, habrás logrado alcanzar tus metas.

Hablo de miedos, porque en su eterna fribolidad acaban siendo dominados por nuestra ambición, por ver alzar nuestros sueños y aunque por mi camino te hallas detenido

a cada instante te recuerdo ( abu te quiero)